lunes, 1 de noviembre de 2010

Somos quienes hemos elegido ser, quizá una mezcla inesperada, algo que realmente nunca quisimos ser.- Cualquier Instinto, pero instinto




























    Lo que nos pasa es el tiempo.
Pasó por nosotros como la lluvia y las risas, siempre rápidas. Con despedidas, odio, repugnancia, resignación, futuro y frustración. 

Somos quienes hemos elegido ser. Quizá una mezcla inesperada, algo que realmente nunca quisimos ser. O quizá somos aquello que necesitamos para sobrevivir en este mundo de engaños.

Hace tiempo que no te veo, que no paso mi mirada por tí.
Hace tiempo que no lloro, que no paso noches encogida, que no me tiembla la voz, que las mañanas no son grises. Esta mañana llovía sin mayor preámbulo, el cielo gris me recordó todos esos días en los que el sol tenía miedo a salir, tanto miedo como yo. Con las mismas ganas de llover.

Hoy por la mañana volví a caer en la cuenta de que ya no te necesito. Creo que ya no me sirve, ni siquiera recordarte.
En cierta forma, siempre fuiste algo de mi pasado, incluso cuando formabas parte de mi presente. Esa "espinita que se había quedado ahí", y que traté de sacar volviendo atrás en el tiempo. Quise mantenerte en mi presente, pero el pasado siempre es pasado, y no paras de hacer el gilipollas pensando que puedes mantenerlo. Como si tuvieras las manos untadas de aceite permanentemente, y tratase de agarrarte todo el tiempo. No pude.
El caso no es la razón, es que lo hice. Contra todo pronóstico.

Hace un mes también creía igual de bien que ahora que toda la tempestad había pasado, pero esa sensación se convirtió en otro de mis arrepentimientos.
El tiempo paso por mí y me llevó donde quiso, hasta el punto de replantearme cambiar la meta. Y con ella todos mis intereses, criterios, dudas, y madurez. Cambio tanto en mí, que llegué a considerarte mi peor error, que no el más grande, si no el peor.

Un error. Pero un error que nunca imaginarás cómo agradezco.
No sólo por todo lo bueno que me diste en cuanto empiezo a echar la vista atrás, si no porque aprendí qué era el amor, qué era sentir lo mismo que la otra persona, eso que llaman correspondido, y creo que es la mejor sensación del mundo. Sentirse correspondido, al mismo tiempo que corresponder.

Y a la vez que me enseñaste todo, también me hiciste comprender que jamás moriría por amor. Porque jamás merecería la pena.



Ya es noviembre, dulce noviembre.

Recuerdo cada uno de nuestros días hace casi un año, pero siendo ya polvo viejo.

Y quería pedirte perdón.
Por tratar de sobrellevar una mentira, engañándote. No fuí nunca lo suficientemente honesta contigo, y ni siquiera me molesté en pensar lo que podría hacerte. Me limite a pensar en mi dolor, y en subsanarlo, pero no dejo de arrepentirme de lo equivocada que estaba al tratar de sentirme mejor haciéndote a tí lo mismo que me hicieron a mí. Provocando en tí la misma razón por la que yo había acabado justo ahí, contigo.

Debería de agradecerte desde lo más sincero de mí todo lo que has hecho, simplemente por hacer que pudiera darle un suspiro a esta angustia. Y siento la crueldad de jugar con otra persona por tratar de dejar de sentir tanto dolor. Fuiste esa persona perdida, en medio de un tren en dirección contraria, siento que tu tiempo estuviese tan y tan mal malgastado, el mío tampoco ha sido recompensado, ni pretendo que lo sea, los errores están para asumirlos.

Es completamente hipócrita tratar de desearte lo mejor y que seas completamente feliz con alguien que no te haga llorar, pero eso no quita a que también me encantaría decírtelo y ¿por qué debería callármelo si es lo mínimo que podría darte?.
Ojalá se muera por tí alguien que te merezca, que no te haga daño, que sea feliz contigo.

Siento que veas que soy feliz con lo que tengo, alucinando cada día más con mi forma de llevar. Sé que sólo tengo a cabrones, soy completamente consciente de ello pero creo que yo también formo parte de una de esas personas que da todo y nada por ella misma,.
Lo peor de todo es estar acostumbrada.


Fin del comienzo.

1 comentario:

Diana dijo...

IMPRESIONANTEEE , me recuerda tantoa una de mis historias y da la casualidad que la empeze un 13 de noviembre y como tu prefiero a los capullos !

Publicar un comentario